Óscar Maya nació un 9 de enero de 1987 en la Ciudad de México, bajo el signo de capricornio, siendo el primero de 3 hermanos; en sus primeros años de vida, fue desarrollando una muy escasa habilidad de socializar con otros niños debido a su personalidad retraída y tímida, sin embargo, esa misma condición le permitió desarrollar otras habilidades, tales como el dibujo, el canto y el amor a las películas de Disney.
Siempre tuvo perros como mascotas, y eso le permitió conocer la responsabilidad, el deber y la capacidad de saber que hay seres que vienen a este mundo a enseñarnos lecciones de amor y confianza mediante lengüetazos y ladridos matinales, que indican que es hora de salir a caminar.
Los valores obtenidos a lo largo de su vida, mediante la Familia, y amigos, fueron forjando en él un nivel de confianza y seguridad que determinó una estabilidad emocional basada en el compañerismo y honestidad, para posteriormente aplicarla en su carrera universitaria como Trabajador Social en la UNAM, carrera que representó un reto muy importante y un parteaguas en su desarrollo. Se pudo cerciorar que los buenos deseos no son un medio de acción para brindar soluciones adecuadas a las necesidades de las personas, se necesita actuar y poner manos a la obra para materializar los resultados requeridos.
Óscar, un guapo mexicano que vive en Cancún.
Este guapo mexicano tiene más de 43,000 followers y sus posts, donde suele posar con elegancia, llegan a tener más de 8000 likes y cientos de comentarios.
Síguelo en Insta: @oscarmaya1
Oscar llegó a radicar a la hermosa ciudad de Cancún en el 2013. Desde entonces tuvo la oportunidad de adentrarse en la industria del servicio hotelero de lujo, en cadenas de 5 diamantes, que le permitió adoptar y compartir la mentalidad del servicio al cliente enfocado en superar la expectativas de los huéspedes y de generar una experiencia inolvidable durante su estancia. Experiencia que ahora comparte en la terminal privada del Aeropuerto de Cancún, como jefe de servicios.
Un hombre con sentido del humor, que sabe disfrutar tanto de una taza de chocolate caliente y un maratón de películas de terror como de una fiesta con música, luces y un par de cócteles a la orilla del mar
Finalmente y como diría Oscar, “No hay nada mejor que reírse de uno mismo”, así que dale una oportunidad a la felicidad y verás que no todo está detrás de una pantalla, sino en lo que puedes experimentar y vivir.
Te invitamos a que seas uno de los seguidores de Óscar Maya.
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